Florence and the Machine – Ceremonials

noviembre 21, 2011

Florence and the Machine

Ceremonials

2011 – Island

[8.0]

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Como algunos sabrán, un buen día Homero Simpson entró al baño de la taberna de Moe y encontró en Barney una voz privilegiada. Mejor suerte corrió la manager Mairead Nash, quién se topó en el baño de un club de Londres con la voz de Florence Welch. El resto es conocido: desde ese entonces el ascenso de Florence fue meteórico.

Luego del exitoso y aclamadísimo Lungs (2009), llegó la hora del segundo paso. Y para esto le llovieron a Florence y su máquina ofertas para trabajar con diversos productores norteamericanos, pero ella decidió muy acertadamente seguir por el camino que había comenzado a trazar en su primer disco. Es así como volvió a recurrir a Paul Epworth, uno de los actores clave en la obra, quien luego del éxito llegó más oficioso que nunca con la fórmula exacta para exprimir al máximo el enorme talento de Flo.

Con relación a Lungs, Ceremonials es un disco más oscuro y teatral: Only for a Night, Shake it Out, Leave my Body… todas tienen un aura barroca, con secciones de cuerdas, órganos tubulares, coros multitudinarios y la increíble voz de Florence al frente.

Never Let Me Go, Lover to Lover y All This and Heaven Too son de un soul extraño, pasado por Bat For Lashes, sobre todo en Spectrum. El tema es que Florence no se queda en esa tendencia de revisitar el soul y el pop de las girl groups de los 60’s, sino que se toma la libertad de construir sobre eso, de innovar. Y ahí, donde mete su toque, es infalible.

Entre muchos de los himnos que ofrece el disco, es inevitable mencionar la hechizante What the Water Gave Me, en donde Florence invoca el espíritu de Virginia Woolf mediante un mantra gospel («Lay me down / let the only sound be the overflow / pocket full of stones«) en cinco minutos y medio de un crescendo hipnótico hasta el estallido sobre el final. Una pieza abrumadora. Otra delicia es Breaking Down, una canción que tiene algo de los Arcade Fire de The Suburbs y mucho Beatles (ningún artista va y graba en Abbey Road sin tener una instancia beatle).

Gran disco de Florence, quien parece tener un poco de Kate Bush, otro poco de Fiona Apple y, por qué no, algo de PJ Harvey, pero sobre todo mucho de ella misma. También es enorme el respaldo de la máquina; una banda increíble que deja entrever en la ejecución la pasión por lo que hacen.

Intenso y espectral, Ceremonials da la impresión de ser un disco en el que la cordura de Florence esta en jaque. Como ella misma dice en Shake it Out: «Es difícil bailar con el diablo en la espalda». Pero, luego de semejante gala, quedamos pidiendo por otra pieza.

DEGUSTACIÓN

WHAT THE WATER GAVE ME