The Vines
Future Primitive
2011 – Sony
[6.5]
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The Vines vuelve al ruedo con Future Primitive, un disco gestado durante los primeros meses del 2010 pero que vio su salida retrasada por problemas con disqueras -¡qué novedad!-. Con ansias de rescatar la mÃstica musical de los 60’s, los australianos se pierden un poco en la idea ya que el rewind musical obsesivo implica una comodidad que no aporta demasiado a la creatividad. Acercándose a Kula Shaker o a bandas neo-psicodélicas, The Vines reúne en este quinto trabajo un puñado de canciones potentes pero un tanto banales.
En esta ocasión no hay una búsqueda muy profunda o, por lo menos, que intente mejorar lo hecho por la banda años atrás. De todas formas, Primitive Future tiene algunas buenas canciones. La voladora Leave me in the Dark remonta a los Beach Boys y sus campos coloridos. Cry es despojada y se acerca a lo hecho ultimamente por los Arctic Monkeys, con una letra sencilla que reclama nada menos que felicidad: «I just want to be happy». La potente y percutiva Riverview Avenue parece sacada de Strangefolk de Kula Shaker o de alguno de los Kinks, pero se termina antes de que uno le preste atención, lo que ingeniosamente hace que uno la vuelva a escuchar varias veces más. All that you Do parece la canción más ambiciosa del álbum al coquetear con bandas como Jet o con Midnight Juggernauts y Cut Copy, donde el rol de los sintes y los coros es vital.
El disco pasa rápido y quizás ese sea el sentido que la banda le quiso dar, pero el concepto suena un poco superficial sabiendo que se podrÃa haber logrado algo más. Future Primitive sirve para pequeños trámites durante el dÃa, nada muy burocrático. Con pagar las facturas alcanza.
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DEGUSTACIÓN
CRY
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