Munch Munch

mayo 10, 2011

Cuatro amantes de ABBA y Weezer se juntaron después de que les haya explotado la cabeza en un recital de Animal Collective. Así dieron luz a Munch Munch y no tardaron en sacar Double Visions, su primer disco. Tratando de alejarse de cualquier tipo de escena musical y guiados bajo sus propios términos, se vieron más familiarizados en un principio con hacer música desde sus computadoras en lugar de tocar instrumentos. En una primera escucha, la banda puede llegar a sonar como un vómito de inspiración: se podría escribir un libro entero detallando cada avalancha de creatividad desprolija que noquea antes de ahogarnos en un gran océano de brillantes matices y tonalidades.

River Gleams

Double Visions es la representación viva del desorden creativo, con tal tiranía que es imposible encontrar una línea constante de batería. Siendo así, si hay algo que juega a favor es la impredecibilidad y los sorpresivos órganos y sintetizadores que nos esperan en cada canción. La crítica no tardó en hacer todo tipo de ecuaciones para definir en pocas oraciones el sonido de la banda. Muchos optaron por «unos Klaxons sin cuerdas, menos grotescos, menos apurados, y menos desesperados por sonar en boliches ingleses»; aunque también recibieron el rótulo de «futuros herederos de Animal Collective», a pesar de que  no cuentan con esos distinguibles loops.

Munch Munch logró sintetizar en un primer disco la actitud maximalista a la que apuntan, con un sonido muy característico ya desde el principio. Puede que la banda esté buscando el productor gurú adecuado que los guíe hacia un sonido un poco más prolijo pero que no deje de sonar fresco y único. Por ahora se sostienen y esconden perfectamente entre todos esos coros tratando de afinar y esos órganos a punto de explotar.

Night Corner

http://www.myspace.com/munchmunchband