Los Campos Magn̩ticos РAlvy, Nacho y Rubin interpretan a Los Campos Magn̩ticos

diciembre 19, 2010

Los Campos Magnéticos - Alvy, Nacho y Rubin interpretan a Los Campos Magnéticos

Los Campos Magnéticos

Alvy, Nacho y Rubin interpretan a Los Campos Magnéticos

2010 РLabil M̼sica

[7.5]

.

.

Dicen que traducir un libro es escribir una obra completamente nueva, desde cero. Esa teoría también se puede implementar en el campo musical y, si queda alguna duda, hay que revisar lo que Alvy Singer, Nacho Rodríguez y Sebastián Rubin hicieron con las canciones de The Magnetic Fields: las adaptaron a un lunfa rock melódico que nos hace sentir en casa con cada nota. ¿El resultado? Alvy, Nacho y Rubin interpretan a Los Campos Magnéticos, un disco nuevo basado en canciones viejas.

El trío se sentó junto a las letras del legendario cantautor Stephin Merrit y les dio un giro distinto, para que el argentino que no entiende una sola palabra en inglés pueda encontrar complicidad en las dulces y a la vez pícaras canciones de The Magnetic Fields. Hasta llegan a límites impensados cuando marcan el barrio porteño de Belgrano como un punto geográfico o califican un mal candidato amoroso como un «garrón».

El costado musical también tiene características muy interesantes. Sólo se grabó en formato acústico y recurriendo a instrumentos como violonchelo, ukelele, contrabajo y guitarras criollas. Además estos tres locos con ganas de crear algo distinto no están solos. Aportan su voz a dos temas Adrián Rivoira y Eugenia Brusa de Les Mentettes. Otro del sexteto que aparece, pero tocando el metalofón, es Pablo Font. El joven multi instrumentista Facu Cruz hace sonar su rebuscado sitar para la canción El Libro del Amor mientras que Faca Rodriguez se encarga de la percusión además de tocar el arpa en el tema que da comienzo al disco. Por último está Alfonso Barbieri, que con acordeón en mano le da un aire aún más rioplatense a El Galán de La Paternal y La Noche Que Olvidaste.

El resultado reside en doce canciones dulces, acogedoras, con un tono de ironía, una pizca de humor, un dejo de tristeza y hasta ciertos rasgos de celebración. Este proyecto, que recibió el pulgar arriba de Merrit, demuestra que se puede realizar un homenaje a una obra venerada pero a la vez innovar, con la consigna eterna de que la música desconoce de barreras, permisos y, sobre todo, lenguajes.

DEGUSTACIÓN

EL GALÁN DE LA PATERNAL