Royksopp – Senior

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Despojados de la lírica vocal que guiaba la trama pegadiza de Junior (2009), su trabajo anterior, Senior se jacta orgullosamente de ser la obvia maduración instrumental que se engalana a través de un variado cóctel de paisajes electrónicos servidos en las nueve delicadas copas vintage que ofrece el nuevo disco de Röyksopp.

Canciones como Tricky Two, con su vorágine eléctrica y su inmutable ritmo, o The Drug, con sus vericuetos minimalistas, se muestran como los álgidos picos de la escasa aceleración del nuevo lanzamiento del dúo noruego, un maduro viaje donde  predominan los paisajes amplios y borrosos. Las melodías de licor flotan en aires nostálgicos, como en The Alcoholic o en el paso cansino y reflexivo de Senior Living y su guitarra gomosa.

Abriéndose de la ruta que podría llevarlos hasta las etéreas tierras donde la comparación con Air sería tenida en cuenta a la hora del juicio final, apuntan a otros horizontes con el misterioso experimento que parece esconder bajo su sombrero Forsaken Cowboy, una embriagadora mezcla entre western desolado y dub.

Merodeando entre los albores del rock espacial y emprendiendo un resacoso viaje de regreso a casa, a bordo de The Fear los límites se expanden en un recorrido tan impulsivo como melodramático. Ya en casa, apagando las luces, Coming Home es una nana lunar que va despidiendo la noche con un delicado beso para dar lugar al más plácido sueño, al que nos llevará Long, Long Way, el broche final de este introspectivo y acolchonado cuarto disco de Röyksopp.

Degustación:

The Fear

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