Clinic – Bubblegum

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Los enmascarados de Liverpool parecen no tomarse muy en serio. Quizá como un gesto irónico, Bubblegum les queda algo ambiguo. Debe ser por eso que los que acaban por reír último… siempre son ellos.

En su sexta producción, con una frecuencia puntual de una cada dos años, Clinic se disuelve en un pop de cámara y le escapa a ese punk arty que los supo tener como puntales en ese espiral hipnótico y cadencioso.

El juego de seducción comienza con I’m Aware y continúa con Baby, dos pegajosas piezas en donde Ade Blackburn te susurra al oído edulcorándotelo a tal punto que desconcierta: ¿pero qué les pasa a estos tipos? ¿Confundieron las dosis que están tan mansitos acaso? Todo bien, no jode. Por contrario, ¡es el Clinic más audaz que jamás se haya escuchado! Se rehabilitan con Lion Tamer y Orangutan, ambas de factura áspera y sideral, pero ligeramente vuelven a caer en la brisa sensible con la encantadoramente acústica Linda y la analgésica vintage Un Astronauta en Cielo (tan literal como astral).

Con Bubblegum, los Clinic responden a signos más vitales y se reinventan para extender su esquizofrenia pegajosa, como un chicle que lentamente va disminuyendo su sabor, pero que así y todo, nunca pierde su gancho.

Degustación:

I’m Aware

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