Últimamente hay una tendencia hacia las bandas compuestas por una sola persona. De alguna manera los avances tecnológicos abren esta posibilidad y cada vez son más los que se anotan en el juego. Jack Tatum es un asolescente de Viriginia, Estados Unidos, que probó suerte con varias bandas pero finalmente se dio cuenta que solo era mejor. Asà nace Wild Nothing, una propuesta entre shoegaze y dream pop que debuta con Gemini, una de las más gratas sorpresas discográficas en lo que va del año.
Ni bien se disparan las primeras canciones es fácil dilucidar que Tatum escuchó bastante a bandas como The Cure, The Shop Assistants o My Bloody Valentine. Las guitarras y las voces cargadas de eco, las texturas melancólicas y los delicados sintetizadores trazan la estructura básica de cada uno de los tracks. Lo interesante está en la variedad del menú: mientras van transcurriendo los tracks, pueden aparecer melodÃas alegres, otras algo oscuritas y hasta algunas más bailables. Pero todo mantiene esa identidad etérea y onÃrica que hace que los 40 minutos que dura Gemini sean parte de un sueño tan hermoso como real.
Degustación:
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