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De la mano fiel de Atlantic Records, Stone Temple Pilots vuelve al ruedo después de nueve años con un disco homónimo para instalarse, nuevamente, en el mundo de la música.
Fuera de pretender ser un álbum de culto, los norteamericanos captaron a la perfección el concepto de «comercial» a la hora de grabar y se volcaron a una fórmula altamente rentable: melodÃas efectivas y estribillos pegajosos. De todas formas, los seguidores de la banda podrán decir que la mÃstica sigue intacta -aun a riesgo de ser criticada por copiarse a sà misma- y cumple con su sonido caracterÃstico de rock y pop, con algunos tintes glam y ciertas corrientes psicodélicas.
El single que pone en marca el disco, Between the Lines, es una canción puramente retro y hitera; no por nada Scott Weiland y la compañÃa discográfica la eligieron como adelanto de su nueva obra. De lo más sobresaliente podemos encontrar Dare if you Dare, que nos traslada a la rÃtmica beatle, Huckleberry Crumble, un rock setentoso y potente y, por último, la interesante First Kiss on Mars, donde podemos descubrir a Weiland en un registro de voz que nos toma por sorpresa.
STP se puede definir como un álbum de fácil digestión, pero no por eso mal logrado ya que suena muy bien y resulta divertido escucharlo. No encontraremos, vale advertir, una realización comparable con Core (1992) o Purple (1994), pero festejamos el cómodo regreso de una banda que brilló en los noventa y promete darnos más alegrÃas.
Degustación:
First Kiss on Mars
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