CELC #14 Cuando a todo le decís shoegaze

abril 15, 2025

Tengo una teoría: Como el shoegaze está de moda (ya hablamos de la indignación de los gordos shoegazeros con tiktok y el boom del shoegaze) hay una obsesión con catalogar absolutamente todo dentro del género. En realidad hay una obsesión con catalogar absolutamente todo (soy culpable a veces) y ponerle etiquetas a las cosas totalmente agarradas de los pelos.

Uno de mis deportes preferidos es indignarme. Tengo muchos consumos que funcionan simplemente para llenarme de ira y putear adelante de la computadora. Muchos de esos consumos son páginas de música: Tengo ciertos enemigos, en su mayoría críticos de música o periodistas de espectáculos, a los que amo leer y dedicar puteadas mientras lo hago.

¿Por qué? Porque por lo general se nota cuando están pusheando una banda porque sí, se nota mucho cuando escriben sobre algo porque le deben algún favor a un prensa o cuando putean a una banda solo por el placer de putearla. Porque por lo general, son un montón de gordos snobs a los que les hicieron bullying de chiquitos y tienen que desquitar ese odio en un ambiente cool como es el ambiente de la música.

La música es un arte y el arte es totalmente subjetivo. ¿Cuáles pueden ser tus fundamentos para criticar una banda salvo que te gusta o no te gusta? No voy a ser hipócrita, yo vivo tirando hate y bardeando bandas, pero la diferencia es que a mi no me leen miles de personas ni tengo más de 100 seguidores en Instagram.

La crítica de música me parece un género horrible en sí mismo, cómo algo que escribe un pelotudo en la comodidad de su mono ambiente en Monte Castro puede o no cagarle la carrera a una bandita que está arrancando me exaspera. Cómo ese pelotudo cree que tiene el poder de juzgar un sonido solo porque cuando era adolescente escuchó mucho Led Zeppelin o le chupó la pija al baterista de alguna banda indie de mierda en sus veintes.

Vivimos en Argentina, el país con las mejores bandas del universo. Un país con un círculo under increíble, de bandas super talentosas que con la nada misma supieron hacernos muy felices, no sé si todos los países pueden decir lo mismo. Acá nacieron bandas que la rompen afuera. Bandas únicas que acompañadas de los peores contextos sociales y políticos crearon cosas hermosas. Bandas que son únicas porque son nuestras. Entonces, ¿por qué catalogarlas como un género que no es de acá, que no es nuestro?

Volviendo al shoegaze, en la música está todo inventado, lo dijimos un millón de veces. Entonces no es raro pensar que haya bandas que tomen elementos de cosas que ya existen para crear un sonido nuevo. Ahora, ¿es necesario catalogar todo y decir que por eso hay una vuelta del shoegaze o hablar del shoegaze argentino?. ¿Buenos Vampiros realmente se mirarán al espejo y dirán “seeeh somos una banda de re shoegaze”? Lo dudo.

¿Por qué esta manía de decir que todo es postpunk si no viene de una movida punk previa o hablar de shoegaze argentino como si realmente fuera algo? ¿Por qué no levantar banderas que son nuestras o crear nuevas?

Este revival del shoegaze del que los llamados periodistas de música hablan, no es en sí un revival del shoegaze argentino (que por cierto, no existe, es una mentira pusheada por Cerati). Son un montón de bandas influenciadas por otras bandas que crean un sonido único e increíble. Un sonido nuestro. En todo caso podríamos hablar de Nu Gaze, pero esa es otra discusión que no estoy mentalmente preparada para dar.

Los periodistas de rock son como las entradas de Wikipedia. Según Wikipedia, JUANA LA LOCA ES SHOEGAZE. ¿Se imaginan? Esa boludez la podría decir cualquier “influencer” musical o periodista boludo de rock. 

Ahora, si el shoegaze es un género puro, con una característica específica, super definido nacido en un lugar geográfico concreto, ¿cómo un disco de JUANA LA LOCA va a ser shoegaze?. Esto no quiere decir que Rodrigo Martín no haya puesto My Bloody Valentine re duro en algún antro de Temperley y diga «che esto está buenísimo, copiemos este sonido». Pero a Rodrigo le debe chupar la pija que venga una boluda o una entrada de wikipedia a decir que el sonido de ese disco era shoegaze. Es el sonido que es y punto. 

Lo que me da bronca de todo esto, es que terminamos haciendo referencia a sonidos extranjeros para sonidos propios, dejamos de lado nuestra esencia para comparar a una banda emergente nacida y criada en Argentina con un sonido que nació en Inglaterra hace 40 años. Terminamos siendo cipayos de nuestros propios géneros musicales. Terminamos siguiendo la línea de la “influencer” musical de turno o el periodista de rock pasado de merca. Me tienen harta.