ENTREVISTA: Daniel Melero

octubre 25, 2012

La iconografía del rock nacional nunca se escapó de Daniel Melero, es él quien evitó formar parte de ella. No le interesa, no le sirve y no le gusta, prefiere seguir formando parte de la diversificación de la que tanto se nutre a la hora de tocar, producir o simplemente escuchar. Este sábado a las 22 se presentará en el Arca Fest, una celebración de «comunión», según sus palabras. Con esa excusa (y muchas más) charlamos con él sobre festivales masivos, la diversidad y el pasado.

-¿Cómo llegás a tocar en un festival como Arca?

-Me invitó Félix (Félix y Los Clavos), que trabaja con quien yo trabajo hace años y eso me resultó suficiente. La organización también recae en Sil (Las Kellies), que toca conmigo. Hay dos vínculos directos… Es más fácil saber cómo llego al festival que saber qué grado de separación guardo con Kevin Bacon (risas). Sencillamente a mí me basta con que a ellos les resulte interesante que yo esté, la invitación al Arca es un halago superior, porque es una estructura formada por los artistas.

Es buenísimo para mí estar ahí.

-¿Cómo vas a adaptar tu show a un escenario inusual como una quinta?

-Es sencillamente pasar un buen día… Vamos a hacer lo que hacemos siempre, tenemos una configuración muy sencilla para tocar. Teniendo en cuenta las exigencias de Félix y Nairobi con respecto al sonido me imagino que va a ser muy sencillo todo. Además, nosotros improvisamos mucho en el escenario y se va a tratar de una presentación breve.

-Sigue siendo un festival inusual…

-Lo es. Cuando yo era muy chico tuve la suerte de ir a muchos festivales que no tenían a la telefonía como sponsor… Por ejemplo, en el Club Comunicaciones el día de la primavera del 70, fui a ver a Manal, Los Gatos y Almendra. Yo iba a esas celebraciones asombrado y me colaba en el backstage, con esa impunidad que tienen los niños. Todas esas eran propuestas distintas. Sin embargo yo lo veía todo como rock. Creo que Arca Fest se parece mucho en el concepto de que el contenido es rock. Siempre mutante y variado.

-El contenido de este festival se puede denominar como «variado».

-Exacto. No creo mucho en la imagen de la escena o las tendencias. Vos ves con la gente que me vinculé, la misma formación con las bandas con las que he interactuado o los músicos con los que toco… Para mí la diversidad es lo mas interesante.

-Se me viene a la cabeza una foto de los ochenta en la que estás con Cerati y Pil Trafa de Los Violadores…

-¡Claro! Eso fue producto de una casualidad para una revista de aquel entonces. Igual con Cerati y Pil Trafa nos conocíamos, íbamos a vernos mutuamente. Yo tengo muy presente un show de Los Violadores, en un teatro con una columna delante del escenario. Imaginate cómo era eso. Pil Trafa se copaba y venía a ver a Los Encargados en cada barcito donde tocábamos y con Soda Stereo, bueno… interactuo desde cuando ni tenían nombre.

-Fijate cómo cambiaron las cosas que ahora vas a tocar en una quinta con bandas punk, dub o de música electrónica, y cuando te presentaste en BA Rock ’82 te tiraban fruta…

-Por ahí tengo la misma suerte y me vuelven a tirar de todo (risas). En ese entonces cometía el error de mostrarme demasiado, no recomiendo que nadie lo haga. Me parece que Arca se trata más de una fraternidad, la fraternidad prevalece al diálogo.

Yo me siento muy halagado de estar invitado. Mas allá de que pueda ocurrir que me tiren fruta, de ninguna manera siento que las cosas puedan desbordarse. Me imagino que es tan profundamente rockero desde el punto de vista que decía antes, de como yo veo al rock. Es de harto interés ver esa diversidad en conjunto.

En los festivales de hoy en día la gente va a ver lo que quiere ver puntualmente, por eso siempre critico los festivales de concentración masiva. Están basados en la comunicación y no en la comunión. La comunión es mucho más interesante que la comunicación. La comunión tiene que ver con la fraternidad y la creación, más allá de si esa creación termina siendo de valor, es mucho más interesante que un contenido diseñado por creativos. Este festival es mucho más interesante que cualquier cosa que se le asemeja a un contenido publicitario.

-Es bien diferente al festival masivo con 4 bandas grandes en un escenario gigante y 120 emergentes en un escenario pequeño al costado.

-Es sorprendente y es lo más atractivo que tiene. Además, no es está hecho, por lo que he conversado, desde un lugar de oposición. No es: «Uh vamos los enanos contra los gigantes». No se trata de eso, se trata de construir un espacio de correspondencia y divergencia.

Los festivales de rock masivos me sorprenden por la falta de curiosidad que tienen… El público va a ver a los artistas que conoce y después se manda mensajes de texto con personas que tiene a 20 metros de distancia. Son gustos y costumbres, yo no suscribo mucho a eso. No tener curiosidad por ver lo que no conocés, habla mal de una persona como escucha de música. Lo más interesante está en lo que te produce disgusto y lo que desconocés.

-Además del hecho de un show al aire libre pero en una quinta, un lugar más ameno.

-El lugar del Arca me hizo acordar mucho al Club Comunicaciones, ahí siempre había grupos de rock y podías jugar cerca del pasto verde, había fútbol… Es algo que puede parecer hippie pero me parece mucho más interesante que estar en el medio del polvo donde se hacen los festivales masivos, ¡uno no puede ir elegante porque se vuelve totalmente sucio!

Foto: Josefina Schmipp

Daniel Melero se presentará este sábado a las 22 horas en Arca Fest, un festival de Crang Records en una quinta de Boulogne. También allí estarán Nairobi, Las Kellies, Banda de Turistas y muchos pero muchos más. Más información acá.