La autopsia de Amy

octubre 26, 2011

El misterio de la muerte de Amy Winehouse terminó: la cantante inglesa falleció por un paro cardiorespiratorio, causado por una ingesta excesiva de alcohol. Las muestras de sangre no reflejaron rastros de consumo de sustancias ilegales, una de las hipótesis potenciales que utilizaban los charlatanes de turno.

Esto fue confirmado por la forense Suzanne Greenaway, que también aclaró que el nivel de alcohol en la sangre de Amy era 5 veces mayor al permitido para conducir. El informe aclara que las causas del deceso no se atribuyen ni al consumo de drogas, ni tampoco a los medicamentos que la cantante estaba tomando para calmar su abstinencia.